
Es un hecho evidente el avance de la secularización de la sociedad española. Según las estadísticas de cada 10 matrimonios solo 2 se producen se producen por la Iglesia. El 80 % de uniones civiles es un dato alarmante, que habla bien a las claras de la galopante desacralización de la sociedad.
Las costumbres católicas están desapareciendo de una manera paulatina, pero alarmante. Hace no muchos años lo normal era casarse por la Iglesia, hoy está empezando a ser «una especie de extravagancia». Y hablamos de matrimonios civiles, sin contar el también cada vez más numeroso dato de parejas que conviven sin ningún tipo de vínculo.
Dentro de los que se declaran católicos solo práctica 1 de cada 4 desplomándose la cifra a solo el 26,6% de católicos practicantes.
Y si hablamos del número de personas que deciden dar su apoyo a la Iglesia en la declaración de la renta todavía el dato es más catastrófico al 14,2%.