
Nos llega desde Nicaragua la triste noticia de un acto de odio a la religión católica: ahorcan a un muñeco que representa a un sacerdote con sotana con el cartel ENEMIGOS DEL PUEBLO.
La Iglesia católica, al ser la única verdadera, fundada por Nuestro Señor Jesucristo es mucho más perseguida que las falsas creencias que no suscitan tanto odio.
Pedimos hacer un acto de reparación por este acto blasfemo y les animamos a ver este vídeo que demuestra que ser sacerdote no es ser enemigo del pueblo sino todo lo contrario, amigos del pueblo para llevar las almas a Cristo y transmitir la buena noticia del Evangelio a todos los hombres.