
A una profesora de castellano de un instituto del norte de Florida le expulsaron del colegio después de que usase términos sexuales para referirse a colegas de profesión. Según un informe de educación estatal, Yessenia Gallardo habló sobre sus acciones sexuales con palabras oscenas y provocativas.
La educadora de la escuela de secundaria Lake City, del condado de Columbia, también tocó repetidamente a maestros varones, según apunta el reporte oficial recogido por el canal de televisión local Action News Jax. Gallardo fue acusada además de intentar ungir a otros miembros del personal del centro educativo con agua bendita y aseguró que compartía ADN con Jesús y la Virgen María.
Nuestro Señor en el Evangelio nos habla de la gravedad del pecado de escándalo y es más grave en el caso de una maestra que tiene que dar ejemplo de moralidad ante los alumnos y el resto de profesores. Esperemos que gente como Yessenia Gallardo sea apartada para siempre de las aulas y se vele siempre por la calidad de los profesores.
Gravedad de los pecados de lujuria
La Iglesia nos recuerda que la lujuria es un deseo o un goce desordenados del placer venéreo. El placer sexual es moralmente desordenado cuando es buscado por sí mismo, separado de las finalidades de procreación y de unión. La fornicación es la unión carnal entre un hombre y una mujer fuera del matrimonio. Es gravemente contraria a la dignidad de las personas y de la sexualidad humana, naturalmente ordenada al bien de los esposos, así como a la generación y educación de los hijos. Además, es un escándalo grave cuando hay de por medio corrupción de menores. La pornografía consiste en sacar de la intimidad de los protagonistas actos sexuales, reales o simulados, para exhibirlos ante terceras personas de manera deliberada.