Con objeto de evitar la profanación de la casa de Dios y tentanciones para los feligreses, el padre Carlos Scarlata, rector de la iglesia San Isidro Labrador, de Zárate (Argentina) ha colocado un letrero en la puerta de su parroquia para advertir a su feligresía como deben vestirse en la casa de Dios.
“Vestimenta no permitida dentro del templo: minifalda, ropa ajustada, shorts, musculosas, puperas (camiseta para exhibir el ombligo), transparencias y pantalones ajustados”, dice el enorme letrero con didácticas fotografías y letras en rojo.
Todo un ejemplo que debieran seguir otros muchos sacerdotes, ponerse firmes para que se vista con modestia en la casa de Dios. Gracias a la Providencia en muchas catedrales y determinadas Iglesias también hay carteles similares.
Lamentablemente en muchas de nuestras iglesias entran los turistas, a menudo ateos o de otra religión, como si fuesen a ir a la playa. Mucho más triste todavía es que los católicos vistan así. También es importante que el sacerdote sea firme y no tenga respetos humanos para advertir con firmeza a las personas que incumplan estas normas. Quitando las catedrales es difícil que una parroquia se pueda permitir tener guardia de seguridad a todas horas.
Si el sacerdote no tiene tiempo de estar siempre pendiente puede delegar esta función en el sacristán que igualmente debe oponerse con firmeza a que entre gente mal vestida al templo….
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Buenas tardes, saludo cordialmente a los lectores de la web. Felicito al sacerdote por la valentía de implementar esta valiosa norma y, los laicos comprometido con la iglesia católica, en mi humilde opinión, debemos apoyarla, ya que es, inadmisible profanar un templo, que es suelo sagrado, con vestimenta inapropiada para el culto de adoración hacia Dios nuestro Señor, que El es, toda pureza , toda bondad, y para ello debemos tener en cuenta el pudor, valor moral inherente del ser humano. Basta de ligerezas y tibiezas en la iglesia fundada por Cristo.