
En su origen, el apoyo al aborto forma parte de un plan eugenista muy antiguo, que se remonta a los años 50.
El apoyo declarado de la ONU, la UNESCO y tantas fundaciones «filantrópicas» a la práctica del aborto en nuestra sociedad nos da una idea de la dimensión satánica de muchas instituciones , supuestamente «prestigiosas», que buscan a todas luces la destrucción de la Cristiandad.
Mientras Europa y la sociedad occidental se autodestruye, las sociedades islámicas siguen respetando la vida y castigando el aborto con gran dureza.
Algo no funciona en Occidente.